Soy Kike. Una tarde estando de compras en el centro comercial ,me reencontré con María. Ella era una vieja compañera del colegio con la cual habíamos compartido clases hace muchos años. Habíamos tonteado varias veces pero sin llegar mas. Siempre nos tuvimos muchísimas ganas. Durante años quise estar con ella…
De contextura mediana, rubia y con un cuerpo precioso. Un culo muy un apretado y redondo, casi perfecto. Además tenía unas tetas en su medida justa y bien firmes. Observe a una guapísima mama que empujaba un carrito de bebé. Su forma de caminar, era un espectáculo cuando me percate, que era María. Nos saludemos con alegría pero ella con un poco de contención, dado que estaba junto a su marido. Me presento a su bebé y hablemos en un corto espacio de tiempo. Ambos deseábamos estar mas tiempo pero su marido, estaba muy encima de nosotros. La situación, era incomoda. Pero no pude dejar de observar que el embarazo realzando sus curvas a un modo muy sensual.
De forma disimulada al entregarle una tarjeta de mi trabajo. El cual le comenté que ahora era agente inmobiliario. Con la excusa de que si algún día necesitaban los servicios de un API, deje mi teléfono..
Con las semanas, los mensajes fueron llegando. Así fuimos poniéndonos al día. María me contaba lo difícil que era ser madre y su mala situación sentimental con su marido. Yo le contaba de mi trabajo, de mis mis viajes y aventuras de la vida de soltero. Realmente solo pensaba en montarme la en diferentes posiciones. Eran pensamientos lascivos de modo obsceno. Entre tantos mensajes, cada vez fui indagando mas y subiendo el tono de las conversaciones.
Después de unas semanas ya era algo habitual el escribirnos. María me consideraba un amigo y yo solo podía imaginarla a cuatro patas, agarrado le del pelo con una mano y con la otra abofeteando su hermoso culo.
Una noche luego de una charla le confesé y lleve al máximo mi intencionalidad al ver reciprocidad. Ella quería tanto como yo pero no se atrevía.
Tanto insistí que finalmente acepto venir a mi casa a tomar un «café»…
Cuando la vi entrar por la puerta, me quede sin habla. Llevaba unos jeans ajustados que remarcaban su precioso trasero. Además de una blusa blanca en la cual, se podía ver a tras luz su ropa interior. Al recibirla la abrace y le di un beso en la boca..
-¡Qué lindo culito te hacía ese jean en el centro comercial Eli!
-¡Ay, eres un atrevido! Jejeje estoy casada ..
-¡Sé que tienes marido pero me da igual!
-Ay, sí ? follame!¡Voy a ser tu puta y quiero que me folles!
¿Me vas a coger como una puta? Verdad?!..
-Si, como una ramera de carretera ! Le conteste..
Acto seguido, sabíamos que nuestro encuentro sexual estaba pendiente.
Comenzamos a besarnos y abrazarnos fuertemente mientras manoseaba su hermoso cuerpo con mis manos. Apoyando mi duro paquete sentía como su mano me lo agarraba con fuerza. Me baje la bragueta y ella se amorro como una perra en celo. Con su lengua, degustaba mi miembro a la vez que se lo tragaba de golpe ! Lamía de manera loca mis testículos de arriba abajo con su lengua. Parecía que casi se ahogaba pero no paraba, me estaba haciendo una mamada increíble !
Me recosté sobre el sofá del comedor, observe como ella para luego despojaba sensualmente de toda su ropa. para luego sonreírme tímidamente en un conjunto de ropa interior blanco que puso duro inmediatamente mi miembro a mil.
Luego se puso en pie, justo en frente de mi. Mientras mi mano jugaba y acariciaba entre sus piernas. Completamente depilada, noté como se mojaba mis dedos bajo su tanga de encaje blanco. Con mi otra mano, acariciaba sus perfectos pechos.
-¿Te gusta así? ¿Cómo una zorra de carretera?
-¡Ay sí! ¡Fóllame así, como una cualquiera! ¡Como una puta en 4!
A lo cual yo acepté obviamente sin problemas. Recostándola en posición en mi sofá, la puse a 4 y me puse un condón. Corriéndose la hacía un lado me suspiro..
– ¡ No aguanto mas, empieza joder !
Empecé a penetrarla de forma suave y luego mas desenfrenada, me volví tan loco que decidí sacarme el condón. Ella, no dijo nada.. Y con las pulsaciones a mil empecé a introducirle los dedos en el ano para dilatarse lo poco a poco. Ella no paraba de gemir como una buena zorra que era. Sin mas preámbulos, se la clave por el culo!
Podía sentir como mi verga se apoderaba de ella. Mientras esta promiscua y lasciva madre, copulaba con otro hombre que no era su marido…
Largos instantes de cabalgada en su culo, me dijo que no podía aguantar mas, Sentía como su cuerpo se contraía, como temblaba y como no paraban de llegar les los orgasmos. Todo ello me volvía loco pero yo, quería hacerla sentir como una autentica puta y después de follarla a 4, de hacer le el culo, me quería correr en su cara de puta..
Ella volvió a hacerme una mamada brutal. No aguantaba tan terrible placer y acabe explotando dentro de su boca.. No me dio tiempo ni de apuntar a su hermoso rostro..
Ya era un hecho, que su marido tenía unos cuernos sobre su frente los cuales nunca podría quitarse. Sería un cornudo. Un cornudo el cual le folle a su mujer mientras este estaba cuidando de su bebé. Ella le había pedido de cuidar a su hija, al tiempo que ella abría las piernas frente a mí y se llenaba su boca de mi leche.